Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (más conocida como FAO), un huerto urbano representa una forma ecológica y más eficiente de cultivar alimentos en comparación con los métodos agrícolas tradicionales.En esta nota te explicaremos de qué se trata este cultivo doméstico y cómo ayuda al planeta.
¿Qué es un huerto urbano?
Los huertos urbanos son espacios al aire libre, o en el interior de una casa, destinados al cultivo de verduras, hortalizas, frutas, legumbres, plantas aromáticas o hierbas medicinales a escala doméstica.
Estos cultivos, al igual que otros ejemplos de agricultura urbana y periurbana—como la acuicultura, la ganadería y la silvicultura—suelen desarrollarse en el centro o en las periferias de las ciudades.
Es importante destacar que los primeros huertos urbanos nacieron con la Revolución Industrial y que se popularizaron varias décadas después, durante la Primera y la Segunda Guerra Mundial; cuando las metrópolis británicas y norteamericanas promovieron este hábito entre sus habitantes con fines de propaganda y para garantizar el suministro de alimentos a la población sin depender de las importaciones. Estos cultivos—conocidos como Jardines de la victoria—llegaron a abastecer con casi el 40% de producción de verduras en todo Estados Unidos.
Beneficios y riesgos de cultivar huertos urbanos
Según la FAO, los huertos urbanos tienen las siguientes ventajas:
Mayor rendimiento de la tierra
Las plantaciones domésticas tienen un potencial sorprendente, ya que pueden generar hasta 15 veces más alimentos en comparación con una explotación rural tradicional. De hecho, es posible alcanzar una producción de hasta 20 kilogramos de alimentos por metro cuadrado en un año.
Son idóneos para cultivar hortalizas
Estos tipos de vegetales son perfectos para la agricultura urbana porque tardan muy pocas semanas en crecer y se mantienen firmes por un buen tiempo.
Son más justos y sostenibles
Los huertos urbanos reducen el número de intermediarios en la cadena de comercialización de las frutas y verduras y favorecen el ahorro de transporte, envasado y almacenamiento. De esta manera, los agricultores obtienen más ingresos y contaminan menos el medio ambiente.
Generan empleo
Se estima que la horticultura puede crear un empleo por cada 100 metros cuadrados de cultivo. Estos puestos de trabajo pueden ser también una fuente de ayuda para ocupar a colectivos desfavorecidos o en riesgo de exclusión.
Sin embargo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) también identifica algunos riesgos de los huertos urbanos como:
Falta de regulación
En muchos países, la actividad de los horticultores domésticos suele desarrollarse sin licencia ni supervisión debido a la falta de reconocimiento en las políticas agrícolas y de planificación urbana.
Contaminación involuntaria
La agricultura urbana puede provocar ruidos y olores que son perjudiciales para el medio ambiente, además de poner en riesgo la salud humana si se filtran pesticidas y abonos orgánicos a las fuentes de agua.
![Huerto urbano](https://test.precios-justos.org/wp-content/uploads/2023/07/huerto-urbano-cultivar-alimentos-sostenible.jpg)
Los huertos urbanos: protagonistas de las ciudades sostenibles
Los huertos urbanos nacieron en los años 60. Estaban vinculados al ecologismo y a los movimientos que reivindicaban un mundo más natural, justo y solidario entre las personas.
En esta época, surgieron grupos como las Green Guerrillas estadounidenses, que se convirtieron en los pioneros al transformar la agricultura doméstica en una forma de autogestión, inclusión social y vida comunitaria.
Desde ese momento, los huertos urbanos se convirtieron en algo más que cultivos de ciudad. Estas parcelas de tierra hoy son lugares para el ocio, la desconexión y la educación medioambiental frente al cambio climático; entre otros.
En la actualidad es muy habitual que los ciudadanos participen activamente en huertos privados o que colaboren en aquellos que son comunitarios. Incluso, algunos ayuntamientos también los contemplan dentro de sus planes urbanísticos sostenibles.
Consejos para construir un huerto urbano en la casa
La construcción de un huerto urbano en casa es una excelente manera de disfrutar de alimentos frescos, cultivados por uno mismo, incluso en sitios limitados. Estos espacios de tierra son cada vez más populares, ya que permiten a las personas conectar con la naturaleza y tener un mayor control sobre los alimentos que consumen.
- Elegir un rincón de la vivienda que reciba luz natural y directa la mayor parte del día. Si la casa no dispone de un lugar así todo el año, es importante adaptar el cultivo a las horas de sol y aprovechar las estaciones más luminosas.
- Escoger recipientes que permitan incluir el mayor volumen de sustrato posible. Además de las macetas tradicionales, existen varias opciones alternativas que ofrecen beneficios adicionales para el cultivo:jardineras de madera, mesas de cultivo, jardines verticales, macetas textiles; entre otras.
- Emplear sustratos orgánicos que sean ligeros, porosos y que retengan los nutrientes fundamentales. Una alternativa ideal es la mezcla de vermicompost (60%) con fibra de coco (40%).
- Si es la primera vez que se hace un huerto urbano, lo más recomendable es empezar por el cultivo de plantones. Para las semillas, se sugiere plantarlas cuando ya se tiene más experiencia.
- Adaptar las formas de regar según el tamaño del huerto. Si es pequeño, es recomendable hacerlo a mano. Si es más grande, lo aconsejable es hacerlo a goteo con programador.
- Las semillas normales se deben enterrar a una profundidad de 2 o 3 veces su diámetro. Las más pequeñas se mezclan con arena fina.
![Huerto urbano](https://test.precios-justos.org/wp-content/uploads/2023/07/huerto-urbano-casa-construccion.jpg)
Conclusiones
Los huertos urbanos pueden desempeñar un papel crucial en la protección y conservación del medio ambiente. Solo se necesita que las comunidades locales tomen conciencia de ello y que los gobiernos locales, regionales y nacionales apoyen la iniciativa.